UAP en Europa: ¡ahora es el momento!
Los ciudadanos tienen una oportunidad única de hacer oír su voz y romper finalmente la omertà, con una carta tipo para enviar a los eurodiputados.
OPINIÓN / LOS PUNTOS DE VISTA EXPRESADOS POR LOS COLABORADORES SON PROPIOS Y NO REFLEJAN NECESARIAMENTE EL PUNTO DE VISTA DE SENTINEL NEWS
Hace 20 años, renuncié a hacer carrera en el periodismo a pesar de tener un título en el bolsillo.
Paralizado por la responsabilidad de tal rol, y por la rigurosa investigación requerida para desempeñar correctamente el trabajo, me alejé trabajando en bienes raíces y luego en la enseñanza.
Bien adentrado en la maraña de este laberinto profesional, dejé de pensar en mi escuela de periodismo hace mucho tiempo, ahora cubierta de zarzas y malezas.
2021. Una combinación de clics y leve curiosidad me llevó a leer un documento: un informe del gobierno australiano sobre la actitud de EE. UU. hacia los OVNIs de 1971.
“¿En serio? ¿Los OVNIs existen? ¿Los gobiernos informan sobre ellos?
¿Los OVNIs existen?”
Tan sorprendente como fue esta revelación, hubo otra que puso mi visión del mundo patas arriba: un gobierno amigo de los EE. UU. estaba acusando a su aliado, a través de la CIA, de llevar a cabo una campaña de desinformación contra el público desde 1953, ridiculizando todo el tema y a los testigos por igual.
Así que durante 40 años, me he reído de los OVNIs y los fanáticos de los OVNIs, solo para darme cuenta (como el General Twining en 1948), de que el fenómeno era “real y no visionario o ficticio”, y que me había dejado manipular por una agencia de inteligencia estadounidense. Una realización insoportable para un francés, uno de cuyos raros momentos de orgullo nacional fue la oposición del difunto presidente Chirac a la guerra en Irak. Una guerra lanzada sobre pretextos falaces ya propuestos por Estados Unidos.
Una cosa llevó a la otra, investigué, indagué, leí. Inspirado por una iniciativa estadounidense, acabé utilizando mi pluma oxidada para cuestionar a mi diputado. Sorpresa: obtuve una respuesta. La publiqué en Twitter/X. Me invitaron a participar en programas de YouTube. Terminé copresentando un canal especializado, y durante el último año, he estado escribiendo para Sentinel, incluso intercambiando correos electrónicos con el Pentágono. Y ahí lo tienen. Hicieron falta ovnis para que volviera al periodismo.
A decir verdad, podría haber prescindido de ellos. Como ya se ha dicho, el trabajo de un periodista, si se hace bien, es exigente, por no decir algo ingrato: verificar la información, buscar múltiples fuentes, solicitar reacciones, luchar constantemente por la objetividad y la consiguiente autocensura…
Todo ello para producir artículos que pocos leerán, salvo el título. ¿Por qué entonces imponer esta contradicción a mi pereza natural, recortando mi precioso tiempo libre como entrenador/músico/jugador/padre implicado?
El mundo “educado” por la CIA
Otra vez la maldita CIA. La campaña de “educación” emprendida en 1953 funcionó tan bien que, incluso hoy, los principales medios de comunicación no se atreven a dedicar los recursos habituales a este tema de innegable importancia geopolítica. Solo un puñado de periodistas se atreve a asociar su nombre a este tema, que tanto hace reír al presentador de televisión o de radio poco informado en secuencias irónicas, cómodamente arrullados con la nana de Expediente X.
Así que aquí estoy, con mi formación periodística en la mano, sin mi reputación en juego, haciendo lo que hay que hacer, con el equipo de Sentinel: seguir las noticias, redactar los hechos, informar al público, transmitir las opiniones de los denunciantes, testigos, científicos y diputados que contradicen la palabra oficial y el statu quo. Mi esperanza: Que todos los periodistas se ocupen por fin del tema, sin temer por sus carreras, y que el público sea tratado por fin como individuos responsables, y no como dóciles y frágiles ovejas.
Con este fin, y para forzar al destino, seguí enviando cartas a los diputados franceses. Tras algunas tímidas respuestas, ahora está claro que nuestra Assemblée Nationale está muy por detrás del Congreso estadounidense, que lucha con uñas y dientes contra el Pentágono y la CIA para informar al público sobre el tema. La intervención del Ministro de Industria francés, respondiendo torpemente a una pregunta sobre los UAP formulada en la plataforma web Agora, no contribuyó en nada a mejorar la imagen de Francia.
Una dolorosa paradoja: Francia es aplaudida por los entendidos de todo el mundo por haber creado el GEIPAN, la primera oficina OVNI, y por haber elaborado el informe Cometa, que llevó al New York Times a devolver los ovnis a la escena pública en 2017— y sin embargo, el tema ha tenido dificultades para aterrizar en Europa… Hasta ahora.
A principios de este mes, el eurodiputado Francisco Guerreiro se dirigió al Parlamento Europeo, instándolo a abordar el tema, e incluso presentando una propuesta para modificar la normativa europea de aviación civil para incluir la notificación e investigación de Fenómenos Anómalos No Identificados.
El representante portugués no se detuvo ahí, ya que acogerá, este miércoles en Bruselas, una conferencia sobre UAP, con la notable presencia del expiloto de la Marina Ryan Graves, quien testificó ante el Congreso de los EE. UU. en julio de 2023.
Poder ciudadano
¿Podrían los OVNIs sacudirse por fin la acusación —tan frecuente como poco informada— de ser una obsesión estadounidense? Yo creo que sí. Impaciente por ver que los grandes medios de comunicación muestran la curiosidad adecuada (e impaciente también por volver a mis videojuegos), tengo la intención de aportar mi granito de arena como ciudadano europeo para fomentar este proceso de transparencia, y sacudir por fin este letargo que ha durado demasiado tiempo.
Es por eso que propongo que todos escriban a sus eurodiputados, utilizando la plantilla a continuación, para instar a la Unión Europea a apoyar la iniciativa del eurodiputado Guerreiro. Hay que reconocer que el poder de una simple carta puede parecer insignificante… como una papeleta electoral. Sin embargo, sumada a otras papeletas, elige e influye en las decisiones políticas. Me parece que una carta no es menos poderosa, quizá incluso más.
Hace 70 años, la CIA tomó una decisión que aún hoy nos afecta, cuya legitimidad procede —en principio, y con varios grados de separación— del pueblo.
Pues bien.
Yo soy el pueblo, y tú también. Si, como yo, crees que Estados Unidos ha sobrepasado los límites al cerrar la conversación, y que sus aliados han permanecido demasiado pasivos, entonces es hora de activarse al estilo Chirac. Ejerce tu poder como ciudadano.
Dada la actual inestabilidad geopolítica, puede que sea ahora… o nunca.
Estimada Señora / Estimado Señor,
Estados Unidos ha creado recientemente una oficina para estudiar los Fenómenos Anómalos No Identificados (UAP). Algunos diputados estadounidenses acusan a su propio gobierno de falta de transparencia pública y están trabajando en una legislación para poner fin a esta situación.
Espero que la Unión Europea aborde este asunto, organice un debate público y fomente que los ciudadanos se expresen y den testimonio en un clima menos estigmatizado.
Le pido, como mi representante, que apoye la Propuesta de Resolución individual para actualizar el Reglamento (UE) n.º 376/2014 sobre la seguridad en la aviación civil, para incluir la notificación y el análisis de los UAP, presentada por el diputado portugués Francisco Guerreiro.
Por favor, hágame saber su posición sobre este asunto.
Respetuosamente.
Puede encontrar el nombre y la dirección postal de su eurodiputado aquí.
También puede enviar un mensaje a través del formulario de contacto en línea del Parlamento Europeo.
Traducción por UAP Spain